Clementina Senosiáin, una de las veteranas en Tómbola.
Con casi 60 años de voluntariado en Tómbola, Clemen, como se le conoce entre los amigas, es una de las voluntarias más veteranas de este espacio. Comenzó siendo casi una niña con 18 años y asegura que aquí permanecerá hasta que llegue el momento de su jubilación, que en Tómbola es a los 75 años.
Su puesto fijo: el de los helados y los globos Allí la encontrarán de 17 a 22 h durante los días que permanezca la tómbola. Y eso que desde la Comisión se recomienda descansar dos días por semana, pero Clemen no quiere… “Yo, desde las 5 estoy en la Tómbola. Si no hay gente aprovecho y limpio hasta el mostrador. Me gusta mucho la Tómbola, es para lo que es y me gusta. Mi marido me anima, sabe que vengo y me entretengo un rato. No me importa si hace calor o frío”.
- ¿Y no ha fallado ningún año?En cierta ocasión, tuve un hijo y dio la casualidad de que no me enviaron carta, así que dije, si no me han llamado, no voy. Y un día pasé por aquí y me vieron y me dijeron, coge una bolsa y entra dentro, me quedé con mi hijo aquí jugando un rato y yo con los boletos…
Como he dicho me gusta mucho, pero sobre todo por lo que es, por lo que aporta…
- ¿Qué recuerdos tiene usted de Tómbola, de cuando era joven?
Recuerdo sobre todo las bicicletas, que estaban enfrente de mi puesto. ¡Y el piso que se sorteaba.!. Luego llegaron las vespas, el coche…
- Y en qué ha cambiado la Tómbola durante estos años?
Era parecido. Antes salíamos a vender por los alrededores de la Tómbola con unas bolsas. Y ya después pasamos dentro. Era más difícil vender que ahora, creo que no tenía tanta aceptación.
Había que guardar los boletos que no te tocaban porque con 10, te daban uno diferente y después se hacía un sorteo. - En tantos años, le habrá ocurrido alguna anécdota…
Una vez me pasó que estaba observando a unos señores que abrían boletos. Cuando alguien se queda al lado, pues ves. Y le oí que decía, bahh un “un cochecito”.Yo le dije¡no lo rompa, que es un coche de estos, que están expuestos, de los de verdad! Y no se lo creía. Le tuve que decir vaya usted a información… y ahí le dirán. Casi se queda sin coche.